jueves, 19 de junio de 2008

Del resentimiento y los adjetivos


Foto: I.N. La que fue mi casa en la Diagonal, 2007

Yo también he sentido simpatía por Julien Sorel, sobre todo en un país como éste, destruido para siempre en lo cultural por una Guerra Civil que fue de clases, y que nos llevó para siempre a la burramia y la pasividad, que desterró de las Universidades toda ilustración y la sustituyó por simple lealtad al régimen, aunque fuese analfabeta. Yo nací en Figueres, pero crecí en la Diagonal, y curiosamente, a pesar de haber sido comunista en la clandestinidad y haberme arriesgado por lo que creía, y haber defendido siempre lo que me parecía ético en los espacios que he tenido y no haber heredado y haber tenido que trabajar siempre, parece que tengo que seguir pidiendo perdón por ello. (De haber podido elegir, habría preferido una familia más intelectual, más de izquierdas y sobre todo, más hopitalaria, pero por desgracia, no me preguntaron.) Lo que me parece mal es que a nuestros políticos, de la izquierda sólo les queda ese resentimiento, y no dudan en apoyar al mercado y dejar que nos gobiernen los lobbies y que las grandes corporaciones decidan cómo debe ser la Universidad y a quién se beca o financia, y asignan a la policía poderes extraordinarios y la sitúan por encima de toda crítica, y sustituyen toda inversión en conocimiento e investigación por inversión en ladrillo... pero eso sí, les queda intacto el resentimiento... o la culpa. (Siempre vuelvo a aquella banda de nombre genial, Os Resentidos de Vigo).

Iba yo hoy andando hacia mi destino -una heladería japonesa de Urgell, donde comprar el postre para llevar a una cena, ni burguesa ni derechista, sino simplemente intelectual- y he cruzado el Turó Parc, pensando: "No todos podemos vivir en estas casas, ni mucho menos, pero todos podemos atravesar estos jardines." Luego he cruzado la Diagonal, mi antigua calle, ahora que la casa en la que viví ha pasado a otras manos y nunca más podré visitarla (qué importa, lo que se veía por las ventanas ya no existe, ha sido arrasado y engullido por el cemento), pensando: "No todos podemos tener un piso ni un despacho en la Diagonal, pero podemos atravesarla, bajo la sombra pequeña de esos pobres árboles altos y flacos, sin lugar para expandirse, que el ayuntamiento ha decidido sacrificar. ¿Por qué? Por dinero, sí, y corrupción y política derechista al servicio de los intereses de un mercado que nos ha llevado a la crisis, pero también por resentimiento.

No son de izquierdas ni son revolucionarios precisamente los que califican Sant Gervasi de barrio burgués y lo condenan a muerte. No es casual que sea éste el barrio donde menos edificios han sido declarados monumento: no será porque hubiera menos... La voluntad de nuestros políticos municipales era clara (aunque algunos de ellos procedan de aquí, pero hay que pedir perdón y pagar, por un extraño masoquismo). Creo que nunca entendieron realmente a Julien Sorel. Es una falsa crítica, sin distancia ni razón, ese resentimiento que sólo se indigna por la frustración de un deseo o que destruye aquello que no cree poder poseer en un "la maté porque era mía".

Un comentarista de El País, escritor cuya novela reseñé yo con entusiasmo en este blog, considera hoy en su espacio que aquí, los poetas bailan una "danza lírica burguesa alrededor del azufaifo". Quizás yo esté equivocada, pero me parece que el adjetivo de burguesa sirve para condenar o ridiculizar todo esto y muestra sólo un prejuicio, un estereotipo, como cuando detuvieron a un millonario por estafa y añadían siempre el adjetivo "judío", pero curiosamente no lo añadían al citar a un prestigioso teórico de la ciencia que gobierna una institución cultural, o un artista, o un escritor, a menos que él se autodeclarase así. ¿Y por qué es una danza burguesa? ¿Porque cuestionar a un ayuntamiento que se ha aliado a las inmobiliarias es de burgueses? ¿Porque se "baila" en la escasamente burguesa calle Arimón? ¿Porque este barrio es tan sospechoso que lo "progresista" es abandonarlo y dejar que lo destruyan?

Antoni Puigverd supo matizar en La Vanguardia sus ideas sobre este barrio, donde sin duda hay alguna calle o franja de calle de ricos, vestigios de alguna zona burguesota, pero también hay -y si no, que le pregunten a quienes llevan la asociación de vecinos- mucha gente mayor en este barrio que pasa hambre, que no llega a fin de mes, profesionales con medios escasos, gente anciana sin recursos y mucha "clase media apretujada", como dijo Puigverd al visitar mi calle. Me gustaría que el comentarista de El País se diera una vuelta por aquí; tal vez concluyera que el origen no lo es todo y que él mismo vive más holgadamente. Es un barrio que fue pueblo, barrio de menestrales, que coexistían con los señores y sus mansiones. Y ahora, cornudos y apaleados. Para el ayuntamiento, tenemos que pagar nuestra culpa y por tanto, no tenemos biblioteca, ni gimnasio ni apenas escuela pública, ni servicios. No nos dan la plaza del azufaifo porque estamos castigados. Aquí apenas llegan los coches de limpieza y una barrendera nos dijo que era "menos prioritario", que sólo venían si les sobraba tiempo: órdenes municipales. Todo es más caro, y no se sabe por qué. Antes, había menos contaminación, más verde, más frescura. Ahora sólo quedan cemento y grúas, ruido y polvo. Pero las tiendas siguen siendo más caras (por cierto que enviar un ejemplar de La plaza del azufaifo por correo a Nueva York, a la fotógrafa que me cedió una foto, me ha costado 16 euros. Me pregunto si también la estafeta de correos será más cara en Sant Gervasi, ya que las farmacias sí lo son).

Es cierto que el resentimiento o esas fantasías sobre la suerte de los otros se pasan con el tiempo: nadie tacha a Mercè Rodoreda de burguesa por haber nacido en Sant Gervasi ni dejan de leer por eso sus novelas. Ni se lo dicen a Casasses, que nació aquí, o a Todó o a tantos escritores. Pero no tenemos derecho a defender un árbol aquí frente al cemento, porque es una actividad burguesa. Tal vez el comentarista no hojee el libro porque lo considera burgués, ya que él, aunque sólo sea por su origen, tal vez se considere revolucionario. Y el origen no lo es todo, y si no, que le pregunten a Nicolás Sartorius, o a algunos empresarios voraces e implacables venidos de clases humildes. También cuenta lo que uno hace, lo que elige y el valor de lo que escribe. ¿O acaso la literatura también tiene que pedir perdón para ser leída, demostrar previamente que no es de clase? Y la demostración necesaria es emigrar de este barrio, no defenderlo jamás, sino echar leña a la hoguera pública.

No se le ocurrirá al comentarista que la ciudad es también territorio común, para todos, y que pasear por una zona arbolada o con casitas antiguas sería bueno no sólo para sus propietarios. Con más árboles llovería más. ¿Acaso Collserola no era el pulmón verde de la ciudad y no sólo para hipotéticos propietarios de pequeñas torres? Los ingleses, que sí protegen su patrimonio verde, ayudan a los propietarios de jardines a financiarlos con la condición de que los abran al público de vez en cuando.

Cada uno tiene su parcela de resentimiento, veamos lo que queda del mío. Como burguesa, creo que sólo tuve un sueño, un espíritu, ya que mi padre dilapidó y mi orfandad material fue para siempre. Tampoco privilegios ni aceptaciones en el mundo literario, que se rige a veces por lo social. Más bien puertas pequeñas y estrechas y condicionadas a quedarme en mis márgenes, donde he aprendido a vivir con cierta felicidad. Márgenes de resistencia y años de trabajo, aunque fuese en un terreno elegido. Libre, inseguro, sin facilidades.

En la antigua Yugoslavia, hubo lugares donde el resentimiento no ganó, y se preservó la arquitectura austrohúngara junto a las mezquitas turcas, las catedrales ortodoxas y al lado se construyeron avenidas arboladas estilo soviético. Pero en Pristina triunfó el eslogan "Destruyamos lo viejo para construir lo nuevo" y la hermosa ciudad turca fue arrasada y conservó su estructura, reedificada feamente con cemento. El comisariado político fue más fuerte. Los censores de nuestro ayuntamiento pretenden hacer lo mismo con Sant Gervasi, y sin duda lo están consiguiendo.

Por suerte, hay comentaristas que juzgan leyendo. Màrius Serra ha leído La plaza del azufaifo y le ha gustado. Lo ha recomendado en su Lecturàlia de Catalunya Ràdio con estas palabras:

Recomanàrius. La plaza del azufaifo, d'Isabel Núñez (amb pròleg d'Enrique Vila-Matas) ... (Melusina, 2008) Isabel Núñez és una escriptora de contes i crítica literària que viu a Sant Gervasi i que, ara fa un any, va engegar una exitosa campanya per salvar un ginjoler bicentenari en un solar del carrer d'Arimon que estava amenaçat per una obra. Aquest llibre reprodueix les entrades que va anar escrivint en un blog durant un any (de maig a maig), i narra la complicitat del barri, de poetes, escriptors i periodistes, com Enric Casasses, Oriol Bohigas, Lluís Maria Todó, Antoni Puigverd, Pi de Cabanyes (que recorda que els murcians també en diuen jinjolero ). Les reflexions poètiques i filosòfiques d'Isabel Núñez s'alternen amb les cròniques dels recitals pel ginjoler i la correspondència amb l'Ajuntament, sobretot amb Imma Mayol. Nuñez no estalvia gens de crítiques a la Barcelona aquesta del Visca per decret. Construlàndia, en diu. Entre les firmes per salvar el ginjoler destacaven les dels pares de l'alcalde Hereu. El blog arriba a llibre per suggeriment de Vila-Matas, que va ser el primer d'escriure sobre el cas a "El País".

Last Minute News:

He recibido un comentario de un escritor amigo que entiende mejor que yo "el caso del comentarista de El País" y elogios aparte, lo explica con precisión y ecuanimidad. Respecto a las razones de los otros, a mí me ha convencido. Dice así: "Jo sempre tinc present allò del pare del Gatsby: que coses que a mi, i altres com jo, ens van ser donades de naixement, com qui diu: l'accés a l'alta cultura, llibres i diaris a casa, bona música i conversa intel.ligent, etc, etc, etc, tot això hi ha molta gent que ho ha hagut de conquerir, aprendre o prendre. No crec que sigui un resentit. Potser té un sentit moral molt rígid, una mica calvinista, i deu pensar que ja tens prou padrins amb els que tens (suposo, no tinc cap dada que em permeti pensar això)... Ah, i no t'enganyis: sí, que has heretat, has heretat moltíssim, des d'uns gens esplèndits fins una manera de parlar, de llegir, de moure't, de sentir música, de relacionar-te amb la gent, has heretat molt, i és tan absurd renegar-ne com enorgullir-te'n, és així i prou. "

31 comentarios:

Ephemeralthing dijo...

Isabela, acabo de leer la crónica de Pérez Andújar, "Leve fiebre guerrillera".
Ese tipo de artículo me parece completamente anodino y literariamente del tipo "redacción colegial de excelente-cuadro de honor". Vacío de contenido y de un romanticismo postmoderno tan, tan, correcto que no hay miedo a que resulte provocador. Los funcionarios municipales hasta lo premiarían a pesar de que les critica sus banderolas, ... "public spam" que las llamo yo.
Incluso la intención con que utiliza la palabra "burguesa" al referirse a la iniciativa de "los poetas de Sant Gervasi" no me parece crítica ni despectiva, quizás simplemente a prejuicio.
Ese tipo de análisis o descripción de realidades es como "muy de aquí". ¿Qué quiero decir con eso?, tú comentabas el otro día que el franquismo es la causa un agujero cultural enorme, yo intuyo que la causa de este vacío viene de mucho más lejos y lo terrible es que el franquismo no es que pese como una losa, es que no se ha ido. Aquí está todavía. Lo reconozco en ese regodeo sentimental, en lugar de horror, ante la fatalidad y ese desprecio, incluso odio, a lo "burgués".
Ese texto rezuma por todos lados esas características que bien mezcladas dan como combinación ese victimismo ("es lo que hay") al que aquí todo el mundo hecha mano y que sirve para justificar ese conservadurismo franquista e ir poco a poco creando un pensamiento único "a la española". No hay memoria.
Sabes que te digo, ¡viva la revolución burguesa!, ¡si por estos lares ni siquiera ha arraigado!. ¿No será esa la causa de tanta barbarie estética?.

ps: pido disculpas si utilizo a menudo un tono vehemente.

Belnu dijo...

Bueno, yo no descalificaría con tanta alegría, conozco a quien escribe y me gustó mucho su novela, que defendí aquí. Pero sí me ha molestado ese adjetivo, como si con eso estuviera descalificado todo esto, y en fin, ya he dicho lo que pienso, me parece injusto.

Belnu dijo...

Cómo sabes que antes me llamaba Isabela? O quizás sea casual

Ephemeralthing dijo...

jajajaj, disculpame otra vez, Isabel.
Primero, me gusta tu manera de enunciarlo "yo no descalificaría con tanta alegría". Cuando hablaba de mi vehemencia me refería a eso.
Segundo, tenía que llegar el momento y llegó, se me escapó lo de "Isabela" porque nos conocemos de los tiempos de nuestro bachillerato. No es que fuéramos juntos a clase pero compartimos amistades. ¡Cuánto tiempo ha pasado!, un placer reencontrarte y no sé si tu me recordarás, soy Javier Romero, amigo de Quique García. Creo que la última vez que nos vimos (año 78) fue cuando me contactaste con tu hermana Alicia para un trabajo que realizó en la Fundació Miró sobre una exposición maravillosa llamada "Suggestions olfactives". Conservo todavía el catálogo.
Lo dicho, un placer reencontrarte y contento y sorprendido con el trabajo que estás haciendo.

Ancheta dijo...

Isabel, estoy de acuerdo con la mayor parte de este artículo tuyo, pero yo no le daría la menor importancia a que un plumilla califique como "burguesa" cualquier actividad. A mí esta crítica me parece rancia y casposa.

Sin embargo, a tu artículo le veo dos problemas. Están en el primer párrafo:

1. No creo que la guerra civil fuera una guerra de clases.

2. No creo en la Ilustración de la universidad antes de la guerra, ni después.

Belnu dijo...

Pero tú qué hiciste en Suggestions Olfactives? También yo tengo el catálogo. Tu nombre me suena, pero no sé exactamente...

Belnu dijo...

Klaus: la guerra civil fue una guerra de clases, es así aunque a ti no te guste, lo saben los historiadores y cualquiera que se haya molestado en estudiarlo. Y aunque tú no creas, no es una cuestión de creencias como si fuera una religión, hay unos hechos que demuestran esa ilustración de la que yo hablo, la Universidad, la investigación, la modernidad cultural, las vanguardias y todo lo que se fue al exilio o a la tumba. En la República atrajeron a la Universidad y a las escuelas a los mejores intelectuales en todos los campos y todo eso lo destruyó el franquismo, hay documentales, libros de historia y testigos que así lo demuestran, desde el gatcpac en arquitectura, los artistas, escritores, los m´`edicos como Broggi y tantos otros. Algunos continuaron su labor en México, USA, Suiza etc., otros murieron o se tuvieron que esconder. Así son las cosas. Si eres negacionista es cosa tuya, pero los hechos están ahí, no es cuestión de creer sino de estidiar y descubrir.

Belnu dijo...

Yo tampoco descalificaría a ese escritor, que según creo se interroga sobre su condición social y la de los otros en su literatura (así lo definía un amigo común, también escritor y creo que tiene razón), no es un plumilla ni es casposo, sino que es un escritor. Lo que pasa es que yo he creído encontrar ahí una razón para un rechazo hacia mis libros, pero igual son imaginaciones mías. Y también es verdad que a mí me venía bien para explicar la actitud de nuestros políticos municipales, y ahí sí lo sé y lo tengo claro; es así.

Gise =) dijo...

Bel la verdad entiendo tu ira, no por la critica sino por lo despectivo del término, pero deconociendo muchos temas de la historia de Barcelona y desconociendo a este escritor, y sus novelas puedo decirte que:
Primero: nena no veas la que se ha liado con el libro!!!! has metido el dedo en la yaga y ahora a muchos les dolerá.
Segundo: me quedo con lo que dices en el post "También cuenta lo que uno hace, lo que elige y el valor de lo que escribe. ¿O acaso la literatura también tiene que pedir perdón para ser leída, demostrar previamente que no es de clase?"
Tercero: yo hace poco que vivo en Barcelona 7 años he visto como en ese poco tiempo toda Barcelona ha decaído. La catedral sin ir más lejos hace ya casi dos años que esta en obras... Y Sant Gervasi es un barrio guapisimo pero lamentablemente está con obras desde hace muchos años.
Por último ustedes dicen que el que se pica ajos come no?? pues quiza a este "critico" lo que le pica es el éxito que está teniendo el libro y la envidia es mala consejera.
Felicidades por el exito del libro y la verdad no es para menos me tiene encadenada a el!!!!!(me encantó leer que Berta se quería encadenar al azufaifo)jijijiji!!!
Besotes corazón!!!!!!

Belnu dijo...

Gisela, yo no tengo ira, sólo me pareció mal un adjetivo y me sirvió para explicar algo que me interesa mucho más, que es la actitud de este ayuntamiento hacia este barrio, hacia una parte de la ciuydad. La consideran infantilmente culpable de su origen y la destruyen con saña y castigan. Y a sus habitantes los castigan por no votarles. Eso mientras ellos se han vuelto pura derecha y hacen sólo política de derechas. Y no se dan cuenta o no les importa destruir lo que es, lo que era, patrimonio de todos, historia, arquitectura, árboles. Por lo demás, eso del éxito de mi libro te lo agradezco mucho, aún es pronto para decirlo, sólo un articulazo de Sagarra, dos radios, veremos si sigue... veremos la presentación...

Ephemeralthing dijo...

Fragmento del discurso de ingreso de Javier Marías en la RAE.

"En el momento en que interviene la palabra, en el momento en que se aspira a que la palabra reproduzca lo acontecido, lo que se está haciendo es suplantar y falsear esto último. Sin querer se lo deforma, tergiversa, distorsiona y contamina. Se lo fragmenta y se convierte en sucesivo lo que fue simultáneo. Se lo delimita con un principio y un fin artificiales, que quedan al siempre discutible criterio del relator, él los establece. Inevitablemente se introduce un punto de vista y por lo tanto una subjetividad. Al menor descuido, uno adjetiva, y los adjetivos habitan en el reino de la imprecisión: aunque sólo sea para señalar que una persona le dio a otra un golpe «fuerte», este variable vocablo constituye ya por sí solo una interpretación, una aproximación, un atrevimiento y una mera conjetura, porque «fuerte» no puede significar lo mismo en boca de una niña de diez años y en la muy fiera del antiguo campeón de los pesos pesados Mike Tyson, por recurrir a un contraste extremo en la posible medición de un golpe".

Dentro de pocas horas me voy unos días a estar bajo olivos, almendros y algarrobos.
Por si acaso: bona verbena per tothom!!

Belnu dijo...

Gracias, Eph, por la cita en el lenguaje preciso de Marías. Y que lo pases bien entre esos árboles (parece el camp de Tarragona...)

Anónimo dijo...

Querida Bel,
me temo que todo (o casi) se resume en el afán de la provincia por destruir la capital, esa ira del que se siente inferior y necesita (re)afirmarse. Por muy exagerado que parezca para mí la destrucción de Barcelona es equiparable a la de Sarajevo en la última guerra balcánica (el pueblo contra la polis). Por cierto, ahora tengo mi oficina en la Diagonal (je, je, je), muy cerca de la Balcells...
Besotes, Christian.

Belnu dijo...

Gracias, Christian, comprendo lo que dices, en cierta manera es así, aunque sea sólo arquitectónicamente, históricamente. ¡Me alegra lo de tu sitio en Diagonal! Te visitaré...

Dante Bertini dijo...

ya borges había hablado de la precisión necesaria en la utilización de los adjetivos:
"Blanco como la nieve...De qué nieve me habla, de qué lugar, con qué luz?"
Acabo de descubrir un blog calcado del mío de poesía, hasta en la forma de no usar mayúsculas.
Estoy replánteándome el sentido de todo esto.
Hay muchos que sólo entrar a robar?
Est@ sujet@ me tenía linkeado y venía casi cada día. Ahora ha cambiado el nombre del blog y me ha robado hasta los links.
Resentimiento y adjetivos no me faltan.

Belnu dijo...

Qué rabia! Hay que decirlo, denunciarlo en tu blog, avisar a los de Creative Commons, seguro que hay maneras de señalar a los que rompen los códigos deontológicos en internet, quin fàstic!

Dante Bertini dijo...

tiene acaloradas respuestas, y un regalito, en mi post

civisliberum dijo...

Esta claro que no tienes que pedir perdon por nada, somos nosotros que tenemos que darte las gracias por poderte leer.

civisliberum dijo...

Los años negros del franquismo negaron la cultura a una inmensa mayoría de gente, los políticos actuales son el resultado del sistema educativo del tardo franquismo, personas que ya no tuvieron el referente de la educación prefranquista de sus padres o de un ligero recuerdo de la educación republicana. Esta falta de base ética y estética la encontramos en todas sus actuaciones. Ya no son los Maragalls, Raventos, Pujols u Obiols que si bien crecieron en plena dictadura sus referentes eran o podían ser de cultos y cultivados prefranquistas. Con los Hereus, Mas, Montillas o Puigcercos sus referentes pasaron a ser personajes que malvivían en pleno régimen sin un recuerdo de lo que fueron tiempos mejores y mas libres.

Otros que si bien con su esfuerzo llegaron a cultivarse, jamás llegaron a superar un sentimiento de inferioridad por sus humildes orígenes frente a los que creían que disponían de privilegios de clase. A veces este sentimiento se transforma en odio y rencor y aprovechan cualquier posibilidad para pasar al ataque.

El autor en cuestión en sus apariciones en “L’hora del lector” realmente demuestra un cierto desprecio frente a la cultura que acogió a sus padres y preferir ir de quintacolumnista sociocultural foribundo de allende el Ebro. Algo parecido a la frase con que termina su artículo en El Pais en el que vierte irónicamente todo el rencor frente a quien vive en la llamada Zona Alta de BCN por muy abandonada y decrepita que este.

Belnu dijo...

Gracias, Civislib! No, yo no tengo esa opinión del comentarista; reconozco que me ha molestado que usara ese adjetivo como descalificación, pero le respeto como escritor y su trayectoria me parece bien. Pero estoy de acuerdo contigo en lo que dices de los políticos, completamente!

Anónimo dijo...

No conozcoco a este amigo tuyo escritor que entiende y da un matiz distinto al tuyo, al artículo del comentarista del País, pero me parecen unas palabras acertadísimas.
Creo que una vez por correo te dije algo similar con palabras mucho peor barajadas.
No todos nacen ( o nacímos) en un entorno cultural favorable..existen personas que no han ( o hemos )tenido esa suerte... recuerdas que te lo dije..?
Sabias palabras las de tu amigo y te quiere bien.
Un abrazo de buenas noches ( vengo del cine)
Jazzy

el objeto a dijo...

estupendo post, cousin, sí, de esos que engancharme en algún lugar estratégico de mi casa, dices muchas cosas que me gustan, que me inspiran, una mirada sobre la ciudad iluminada,

yoodio a la gente uqe para no pensar y crearse un juicio, (les resultaría fastidioso porque tendrían que partir de ellos mismos) usan los pre-juicios y encima se atreven a hacerlo en letra impresa. Los prejuicios están para la intimidad y para cambiarlos constantemente, merluzo!

yo creo que heredar cosas buenas y tener ciertos privilegios le ayudan a uno a poder ser más consciente, más responsable y generoso

Belnu dijo...

Yo diría que lo de la herencia, no en sentido material sino todo lo que uno recibe, aunque sea ese espíritu de lucha contra la adversidad que yo no recibí o esa ambición material o social que tampoco, o los recursos para moverse en el mundo de los que hablaba Lluís Maria, cada uno los usa como puede y elige. Y los prejuicios también! Y también hay otros que no saben lo que tienen ni lo agradecen ni superan los celos y el resentimiento por lo que no tienen. El mundo es un gran hospital, ya lo dijo Baudelaire, y todos tenemos nuestras enfermedades. Pero por suerte podemos elegir con quien nos relacionamos y a veces tenemos suerte de encontrar y contar con algunos seres afines que nos alegran y tranquilizan y hacen pensar: como me pasa a mí contigo!

Unknown dijo...

A mí sí que em va sonar a ressentiment, i diria que PA no ho negaria pas... Simplement li demanaria que s'ho deixés córrer, em penso que té coses més interessants a dir... Cert, com diu el teu equilibrat amic, tens herència: i PA també...

Belnu dijo...

No ho sé. En aquest cas, m'interessa molt més el tema d'aquest ressentiment/culpa en l'ajuntament i els polítics municipals, el cas particular només era per mi una demostració d'una actitud que es disfressa d'ideologia d'esquerres i, de fet, és tot el contrari. Creure que l'origen et justifica per fer el que vulguis o que has de negar l'origen fins i tot destruint el patrimoni de la ciutat per demostrar no sé quina lleialtat (que al final és al mercat, als valors de dreta, etc)... en fi, jo volia parlar d'això i no d'una persona. Pel que fa a les persones, hi ha altres coses, però aquí no m'interessa parlar-ne. Jo compadeixo qui no coneix l'agraïment ni pot ser generós...

Unknown dijo...

Del tot d'acord, Isabel... He tornat al tema anecdòtic perquè em va sorprendre i irritar... El tema gros del teu post, les classes dominants i la ciutat... uf, és certament grosssssssssss... de Grosz, no trobes?

Belnu dijo...

Gros de Grosz! És veritat! Amb tot el pessimisme crític i la caricaturització potencial que implica...

Anónimo dijo...

querida Bel:
Entre cines, nataciones, y demás ocupaciones, hasta ayer no pude empezar el libro.
No sabía que fue V la que descubrió el orígen del centenario árbol, tampoco que se falsificó la documentación por parte de la constructora ( y los de arriba , tragando). En fin a medida que leía y me enfurecía, también se me dibujaba una sonrisa por la ironía con la que tú deconstruyes o construyes, no sé bien, las cosas: "Derribos" tú, ellos: " Deoonstrucción",jajaa Deméter,la diosa Griega de la agricultura,
Excelente prólogo de Vila- Matas con el final de Cernuda:" Un dia , tú ya libre/ de la mentira de ellos", perfecto.
Sigo leyendo, me está gustando mucho.
Un saludo cordial
Jazzy

Belnu dijo...

Me alegro de que la natación sea una de las cosas que ocupa tu tiempo, qué refrescante. Y de que te guste el libro...

Anónimo dijo...

la natación es mi cable a tierra, me salva de muchos peligros, peligrosos,( ha ha ha, para la mente).
Reitero, no sólo me está gustando, sino fascinando.Me siento tan identificada....
Tu ética,ha sido siempree valorada por mi
Más Saludos!

Belnu dijo...

Gracias, Jazzy... Ese estado ingrávido también me gustaba a mí... De hecho aún espero que se extienda otro sistema sustituyendo al cloro para volver a nadar... En cuanto a la ética, siempre alegra compartirla en este mundo de trogloditas!