jueves, 4 de diciembre de 2008

Malaise

Foto: Linda Danz Willows in Central Park, 2008

No puedo apenas escribir aquí, he caído enferma y paso las horas echada, leyendo a Isabelle Eberhardt sin acabar de hilar mi conferencia, entre los estragos que produjo en mi estómago la medicación para mi brazo, los excesos del día del aniversario de mi padre (alguien me invitó a comer en un restaurante maravilloso, pero mi aparato digestivo ya no podía resistir siquiera el maná), la lluvia de mensajes apocalípticos y agoreros que me predicen lo peor, las voces internas que celebran esas maldiciones chamánicas, y un trancazo con el que me he levantado hoy, con la garganta como si me la hubiera arañado un gato.
Todo se mezcla, en ese estado intermedio entre el sueño y la vigilia y la lectura de ese espíritu errante y loco. He logrado, eso sí, reunir fuerzas para imprimir y enviar mis cuentos a una editora, y ayer recibí un mensaje de otro editor que me conminaba a mandárselos inmediatamente (¡no todos los editores del país son alérgicos a los cuentos!), y me pidió que añadiera una nota con mis "intenciones". Esa idea me desconcertó un momento, como cuando un prestigioso crítico acabó su comentario sobriamente elogioso de mi escritura diciendo: "Falta ver si hay detrás un proyecto literario". "No tengo ningún proyecto literario", pensé yo, contrita. Y es que los que escribimos a ciegas no tenemos proyectos ni intenciones, no pensamos: "Ahora escribiré una tetralogía sobre... el legado del nazismo", por ejemplo, como los escritores que sí planifican. "Escribimos para saber lo que escribiríamos si escribiésemos", decía Marguerite Duras. El proyecto es del inconsciente y sólo se ve luego... "Se hace camino al andar", me dice V., citando a Machado (por cierto que ayer me escribió alguien que procede también del Alosno y desciende como supuestamente yo de Machado y me ofrecía un intercambio de copias de legajos y le he remitido a mi hermana que investigó).
Así que cogí una hoja de papel -metafórica- y escribí lo que yo creo que son esos cuentos, a posteriori, porque antes de escribirlos no sabía nada, excepto una frase, una imagen, una escena, como Flannery O'Connor, o como aquel hombre de Carver que "estaba pasando el aspirador cuando sonó el teléfono".
Y hablando de Carver, hoy ha habido algo que me ha parecido un cuento suyo. Los compañeros de juego del empresario asesinado por ETA continuaron jugando la partida, con un sustituto. Las caras de todos, tal como aparecían en la portada de un periódico, inmutables y sorprendidos del revuelo, me han recordado a aquellos hombres del cuento de Carver, que no interrumpen su excursión de pesca al encontrar el cadáver de una mujer desnuda. ¿Es ésa la naturaleza humana? Como aquellos personajes de Aleksandar Hemon que arrastraban camillas de heridos por los desfiladeros, sorteando a los francotiradores, entre aullidos y sangre de los heridos, pero que, si morían, sentían alivio de poder sentarse a fumar.
Y dicho esto vuelvo a mi retiro de enferma, no sin despotricar un momento contra los estúpidos trolls, que vienen muy de vez en cuando aquí a descargar su agresividad, su ignorancia y sus tonterías; hoy uno que no entiende la relación entre mi texto y la imagen y pasa al ataque. Yo no espero ni necesito que me entienda ni que le interese. Esos anónimos no pasarán. Aquí es mi casa virtual y está reservado el derecho de admisión.
Al día siguiente...
Escribo aquí, escondida y refugiada, para hacer sitio y dar visibilidad a mi manifiesto arbóreo. Ayer osé salir de casa (fui adonde P., que me hizo yuki, y pasé por La Central, pero no tuve fuerzas ni para subir al piso de arriba) y lo he pagado con una noche tormentosa. El arsenicum album me curó el estómago y ahora ya no estoy triplemente enferma (sólo doblemente). Mi gripe es sobre todo ósea (Ossi di sepia!) y de noche sentía dolor en todo el cuerpo, la tendinitis al rojo vivo y eso sí, la noche estuvo llena de ensoñaciones y aunque todo parecía dramático y cercano a la muerte, la belleza de ese material que produce mi inconsciente me subyuga y lo agradezco. Tenía tanta nostalgia de mis sueños que los he agradecido, pese a los precipicios y al vacío y a los sobresaltos. Los contaré aquí tal vez... Anoche me alegró un email. Hoy otro. Mi editor de la plaquette me preguntaba si quería corregir algo porque está preparando la plaquette de la conferencia que di en La Pedrera, Els meandres de la traducció. Iba a publicarse primero en castellano en la revista de ACETT, Vasos comunicantes, pero por alguna razón misteriosa, ese hecho no se produjo. Así que la proximidad de la plaquette me ha llenado de alegría. He impreso y releído el texto, he cambiado una coma, dos negritas y poco más. ¡Los textos necesitan salir y ser leídos! La escritura necesita ese aire de las publicaciones, salir al ruedo, exponerse al feedback de los lectores, escuchar sus interpelaciones... Por eso yo, impaciente aún en plena gripe y con los tendones machucados, sufro por mis cuentos que he entregado apenas hace semanas a unos pocos editores... Y necesito que mi libro balcánico aparezca ya y que salgan mi audiolibro Crucigrama y que todo el engranaje continúe...

13 comentarios:

odette farrell dijo...

Zbelnu,

Hasta enfermita escribes lindo... recupérate pronto.

Belnu dijo...

Huy, gracias, Odette! Ojalá te oigan los hados. Pronto nos veremos...

Ephemeralthing dijo...

Me gusta el retrato de Duras por ese icono tan parisino que se puede ver detrás de ella, la chimenea con el espejo "apoyado" encima de su repisa.
Supongo que en realidad siento nostalgia del "estilo", ya que por aquí eso consiste en arrasar con todo lo que tenga cierto carácter y tradición. Hace días que en el local del edificio de al lado, ese que "reformó" Vértix, han estado haciendo obras instalando un pavimento y falso techo que dan ganas de "ponerse a llorar" de lo feos y cutres que son. Además, ya ni siquiera me pone de mal humor, los operarios tiraron las sobras de cemento en el hueco del árbol que hay enfrente, manchando también parte del tronco. A nadie le parece mal, ese es el "estilo" de aquí. Por eso digo, en realidad creo que siento envidia.
Cuídate, .... cuando estoy cansado, enfermo, tengo sueño, etc, es como si el terreno estuviese abonado para empezar a pensar en "lo peor". Lo ignoro del todo y sólo me ocupo de mi mismo.

Belnu dijo...

Tienes razón, Eph, por eso necesitamos huir a otros lugares de Europa, tú a Berlín, yo pronto a Bruselas, para calmarnos junto a los árboles con inmensos alcorques y sin cortes de cuchillo ni cables atados, para ver los edificios vetustos cuidados y protegidos, para andar por calles silenciosas y no siempre llenas de rótulos feos ni de locales comerciales.

´´ dijo...

Bueno recuperate , pues no entiendo lo de los cuentos , a mi los libros de cuentos son los que mas me gustan , creo que he leido muchos mas libros de cuentos que de Ensayo o poesia y muchisimos mas que novelas que leo muy pocas . Quiza los suplemtos de los diarios tendrian que publicar cuentos de forma habitual en vez de tanta foto .

Belnu dijo...

Toda la razón, (misterioso) Francis Black. A mí me encanta leer cuentos. Sólo una editora, Anna Maria Moix, me dijo que eso de que los cuentos no se venden es un contubernio entre editores y jefes de suplementos literarios. Me encanta esa sugerencia de que publiquen cuentos en vez de tantas fotos! A mí me gustaban los suplementos tipo TLS, mucho papel y mucha letrita, y muuucho trozo destinado a libros. Gracias por los buenos deseos, espero que dure sólo horas

´´ dijo...

misterioso ?

Anónimo dijo...

Bel, I can kind of read through the software translation, but it's great to see the pure music in your writing. You write like a dreamer who only pretends to be asleep so as to see the world through a dreamer's eyes and still be incisive and pragmatic. Thank you for this. I am adding the Duras quote to my e-mail quotes. I feel exactly as you do about the writer's who are organized with projects and know what comes next. They work like mules. You write like an angel...
"The project is in the unconscious and is only seen afterwards… Is this you or still the quote from Duras?" It's beautiful. That passage from Hemon is hauntingly beautiful.
Linda

Belnu dijo...

It is mine! Duras only said this sentence difficult to translate
"We write to know what we would write if we would write".
Thank you, Linda, for your beautiful metaphores about my writing.
I will save your message in my "For Dark Times" file.

Anónimo dijo...

Que te mejores. Un abrazo y la solidaridad de mi propio "proyecto inconsciente"

Belnu dijo...

Gracias, Jorge! Espero que pronto veamos ese proyecto tuyo en las librerías!

Dante Bertini dijo...

la malatia crece a nuestro alrededor como un cáncer que todo lo destruye, lento e inexorable
Los árboles, las especies, nosotros mismos, estamos siendo a atacados por ese no estilo (ephemeralting dixit) del desastre y la torpeza más ruin.
Hay que sacar fuerzas y esperar, deseándoles lo que de verdad se merecen. Todo lo demás podría parecerse a la autodestrucción.

Belnu dijo...

En efecto. Aunque esta noche, dolorida y en los sueños que ha generado mi gripe ósea, todo parecía dramático