martes, 10 de agosto de 2010

No hay nadie

Foto: I.N. Autorretrato de mi sombra en un campo provenzal, 2010
Mi barrio está desierto. El silencio sería maravilloso, pero quedan las destructoras grúas de la mafia del cemento. Temo que estén convirtiendo la ciudad en un bosque de grúas. Pronto sus siluetas serán lo único que se alce en lugar de los árboles, y la única sombra estará en los toldos y marquesinas. No queda apenas gente conectada, tengo la impresión de escribir para nadie, como el cuento de Grimm en que la falsa pastora de gansos le contaba sus penas a una vieja chimenea. Sólo que allí había un rey escuchando detrás.
Traduzco Giono, qué lenguaje. A veces siento la lejanía del castellano respecto al resto de lenguas románicas. Podría decir lo que él dice en italiano o en catalán, pero el castellano difiere demasiado. Allí los árboles son gigantes y no para de nevar en invierno y de llover en primavera.
Anteanoche seguí con Los árabes del mar de Jordi Esteva, pero anoche tuve que dejarlo por "Mi vida", de Chéjov, que no es ninguna autobiografía sino una novela corta sobre las dificultades y el enfrentamiento con el padre de otro narrador, huérfano y solo en un entorno espinosísimo y antihospitalario, que se hace despedir de todos sus trabajos. Es posible que el padre, religioso y violento, sí se pareciera al padre de Chéjov, o tal vez no, who cares? Es magnífico ese relato, que leo en inglés porque encontré esa edición anglosajona de sus nouvelles bonita y de bolsillo, con traductores premiados (por su versión de Anna Karenina y etc), cuando estaba en NY y buscaba "La estepa". Y lo había tenido que dejar y fue RFT quien anoche me recordó que lo había dejado! Fue una alegría el reencuentro y me los llevo los dos aal mar).
Yo miro los objetos expuestos por razones otras que la adquisición. Un vestido en un expositor me recuerda otros tiempos míos o me sirve para componer un personaje o una vida otra. A veces he llegado a comprarme algo que nunca me pondría sólo porque me recordaba a otra pieza más antigua, asociada a un tiempo del que quisiera escribir. Tengo una fascinación con las casas y me apego mucho más a las casas donde he vivido que a ninguna otra entidad. Ahora hay un piso libre en un edificio donde viví hace muchísimos años y he llamado para visitarlo, con mi cámara, ¡qué emoción entrar allí otra vez, como en mis sueños! Me han dicho que estaban de vacaciones, así que Till September, Petronella. Ojalá no se me escape... He llegado a la conclusión de que lo mío no es nostalgia, sino deseo de escritura, de reescritura.
Todas las predicciones autóctonas dicen que van a haber lluvias y nubes y que no veré el sol en estos días. Ojalá se equivoquen.... Yo quería bañarme y cerrar los ojos al sol, porque a veces, én esa posición alejada me surgen las ideas más enterradas... He visto un breve reportaje sobre un "apneista" francés casi mítico, Loïc... con aspecto de hippy rubio de los setenta, ejercitándose como un yogui y sumergiéndose más y más hasta que murió... Me preguntaba si esa necesidad de forzar algo imposible podía conectarse con mi necesidad de partir de cero cada vez que escribo. Ayer se lo contaba al Librero de la calle Berlinès. Podría haber aprovechado que mis cuentos últimos eran casi una novela y haber utilizado esa estructura para dar un paso más y... Pero no. He tenido que adentrarme en territorio completamente desconocido, con todo el vértigo y la dificultad y el peligro del fracaso, para escribir la novela. Siempre que reviso mis libros anteriores pienso: "antes sabía escribir... ahora ya no podría..." Sé que no es cierto, que realmente se avanza, pero por lo visto yo necesito llegar a esa sensación de tábula rasa, de inocencia, que tanto me desespera, para encontrar algo nuevo. No sé escribir de otra manera...
Lean mi reseña de Isak Dinesen en La Vanguardia Cultura/s

19 comentarios:

JML dijo...

No sé si, visto lo visto, soy el rey de la chimenea, por aquello de leer como quien escucha y escribir como quien responde, pero al parecer sí hay alguien ahí.
Yo también espero días de sol y playa, la música del mar como ritornello...
Hay algo que dices, hacia el final del post, que me resulta muy familiar. Eso de que, también en la escritura, cualquier tiempo pasado fue mejor. En el cajón duerme una voluminosa e inacabada novela que repaso en ocasiones y que todavía creo que podré terminar. A pesar de todas sus deficiencias (lo suficientemente graves para invalidarla), me sigue pareciendo que aquella escritura es más inmediata, más vital, más plena. Ahora mismo no sería capaz de escribir con aquella frescura... Me pregunto si todo lo que vamos acumulando por el camino nos vuelve más desconfiados, más inseguros, a pesar de hacernos más sabios ¿Es la inseguridad el precio de la sabiduría?

Belnu dijo...

Bienvenido, rey de la chimenea! Me has hecho reír. Yo no creo de verdad que lo que escribí antes sea mejor, la única diferencia es que cada libro encontró su tono y el de ahora no lo ha encontrado... aún, ni tenemos ninguna certidumbre o garantía de poderlo encontrar. Es, omo siempre, y como me recordaba ayer el librero, aquella cita de Ricardo Piglia que habla de la literatura y el psicoanálisis como el arte de la flotación, que mantiene a salvo a gente que está siempre a punto de hundirse, y añade que el escritor es el que ha nadado pero no sabe si volverá a flotar en el mar de las palabras, more or less...

Anne (Cabo Leeuwin) dijo...

Uffff...........

Se ha borrado mi larguísimo comentario y ahora soy incapaz de volver a escribirlo.

Hay cosas que solo se pueden hacer una vez.

C'est la vie.

Felices días al sol.
(En mi isla no faltan)


Anne

frikosal dijo...

Siempre hay alguien leyendo al otro lado del cable!
Estupenda esa resenya, buscare el libro, y tremendo lo de las llamadas que comentabas en la otra entrada.
Animos con tu novela y hasta pronto.

Jesús Garrido dijo...

excelente, que buena forma de escribir

odette farrell dijo...

"antes sabía escribir... ahora ya no podría..."

Yo cuando veo mis cuadros antiguos, es lo primero que me viene en mente... Pero estamos equivocadas Isabel, creo que siempre seremos miopes respecto a nuestra propia obra y jamás podemos juzgarnos a nosotros mismos, es como verte a ti misma, aún con un espejo la imágen no es real :)

Belnu dijo...

Gracias, Jesús!

Belnu dijo...

Odette! Sabía que tú me entenderías! Yo sé que es un espejismo, pero qué desconcertante, y ese camino del no saber cada vez, qué extraño, aunque al final sea mucho más emocionante cuando lo encuentras

Stalker dijo...

No hay nadie y sin embargo estamos aquí,

nos acumulamos en los signos,

besos

Bel M. dijo...

Yo estoy, semi anónima y medio viva, pero estoy. Lo has dicho muy bien, con claridad meridiana. Es exactamente así, como lo cuentas, por lo tanto ¿no es una paradoja? puesto que sabes escribir que "no sabes escribir".
Espero que estos días estén siendo como deseabas.

civisliberum dijo...

Te sigo leyendo, pero marcho hoy. Realmente la ciudad esta deliciosa.

Anónimo dijo...

Sí, el tiempo nos cambia levemente. Cambia la manera de enfrentarnos a las cosas, a la escritura, ahora recuerdo la situación de esos escritores que se quedan secos", o pintores que se repiten hasta el final, que menuda pérdida de tiempo o pasa tiempo, la fuerza de la costumbre, supongo, o será otro tipo de obsesión, me pregunto. Emprezar siempre de cero parece una buena solución.
iluminaciones.

Albert dijo...

jo sí que hi soc i et llegeixo.

Belnu dijo...

No hay nadie, pero estamos! me encanta esa idea, Stalker, gracias!

Belnu dijo...

Ah Bel, yo he vuelto como sabes con menos facultades, pero saberte ahí me ha con-solado de mi de-solación al llegar

Belnu dijo...

Civislib! ya nos contarás de tus veranos franceses, hasta pronto!

Belnu dijo...

Iluminaciones! Empezar de cero no es algo que yo decida, en cierta manera me lo impone ese amo, ese patrono del que habla Natalia Ginzburg y que manda sobre los escritores, llamémosle inconsciente, don o musas, ahí está con su látigo restallante...

Belnu dijo...

Albert! Deus estar a punt d'anar-te'n al teu silenci cruixent dels murs de pedra seca! Si no hi ets ara mateix... Però m'ha alegrat que hi fossis

Belnu dijo...

Gracias, Friks! Me alegra mucho tu lectura...