martes, 10 de julio de 2007

Soirée snob chez la princesse

Miró, 1944 (col. L.-G. Clayeux)


Siempre me gustó ese cuadro, el título y la atmósfera de esa fiesta llena de música en el aire, de estrellas, de ojos visionarios, de encantamiento verde acuático y esnobismo mironiano. Una amiga, a quien su madre llamaba "la princesa" de pequeña, concediéndole un principado en los dominios de su reino metafórico (aquí todos somos republicanos), me invita precisamente a una soirée y como ella no conoce o no recuerda el cuadro, me he puesto a buscar en vano, primero en mis libros, luego en Internet, hasta que he encontrado a un amigo poeta que tal vez, hace muchísimos años, me enseñó el cuadro in the first place. Y al llamarle, ha resultado que lo tenía, lo ha escaneado para mandármelo y aquí está. En su mensaje me propone colarnos en esa fiesta mironiana y recuerda que hizo un poema (en prosa?), ya hace muchíiiisimos años. Lo pongo aquí:
SOIRÉE SNOB CHEZ LA PRINCESSE
Joan Miró
Tothom té molt d'ull per a les coses indefinibles, tothom viu entre estels i al·lusions, entre colors vius i definits i el clar verd snob. N'hi ha que tenen el cap més amunt del cap, n'hi ha que s'obren de cames i braços i mostren, ingènuament grassos, l'ull que tenen a les entranyes, i es fan l'ingenu per no semblar ingenus. D'altres són tot ulls i cul. En Mort-de-gana es fa el milhomes. Els quatre-ulls es fan el polifem. Els caps quadrats es pensen que el tenen rodó i amb tres ulls asimètrics. La dona de vestit
llarg i llis, negre sense mànigues, camina sempre amb les espatlles mig aixecades i les mans horitzontals fent angle recte amb els braços; el cel s'ondula de músiques; ¿és ella la princesa? ¿o la gata del racó? El cel és verd clar. Els ulls es besen o es peguen. Les paraules, cristal·litzades, són estrelles 1914.
Enric Casasses
Y es que sueño justamente con colarme en el cuadro, como hacían en los cuentos, subiéndose a una silla y metiendo el pie, y la pintura se volvía gelatinosa para acoger a los personajes que la atravesaban, para escapar del ruido insidioso y enloquecedor de las grúas (yo sigo con mi obsesión: es muy significativo que el ayuntamiento no imponga límites de decibelios a las obras, que la construcción esté por encima de todos los derechos, que el derecho al silencio no sea diurno en Barcelona, que este embrutecimiento miserable sea legítimo, como cortar los árboles. ¿Para cuándo el cambio de ordenanzas?), o con un paréntesis nocturno que se prologara indefinidamente, o unas vacaciones, o mi beca, que me permitiría huir a escribir y dejar todas estas traducciones urgentes que me amarran aquí, al duro banco del forzado, sin dejarme siquiera el refugio del sofá y la lectura más ociosa...
Volviendo al cuadro, esa atmósfera me recuerda a la Fondation Maeght de Saint Paul-de-Vence, ese jardín mediterráneo con aire de escena de happening y peces pintados en el fondo del estanque (¿eran de Braque?), la misma atmósfera festiva de imaginar a Braque, a Picasso, Miró, Giacometti, Léger, Maeght, Sert en un ambiente festivo, mediterráneo y prolífico, de mutua inspiración, como en Antibes o Vallauris. Pero quizá es sólo mi obsesión por huir, la pata quebrada de la traducción, esta luz del verano...

Una referencia al ginjoler...

10 comentarios:

  1. danzando entre las manchas de miró?
    un sueño muy especial

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  2. Tiene mejor pinta que el amnesia, no crees?

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  3. magnígico cuadro! qué bonita época la de Miró, sí, el edificio de su museo en barcelona y la Maeght de Sert! hasta hace unos años cada verano intentaba visitar la Miró y el museo picasso como si fuera una turista, me encantaba mi pequeño ritual veraniego... echo de menos esa barcelona con poca gente, pocas cosas que hacer, viejos museos que sabían a mucho...

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  4. Saint Paul-de-Vence y las escultura de Giacometti y los pinos y la luz y...

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  5. Sí a las dos cosas, V, la ciudad vacía, el Museu Picasso sin colas, las Rambles sin obstáculos, donde nos encontrábamos a los amigos, a veces!
    Y en efecto, Nmp, la luz de aquel sitio mágico, pese a la disneyficación de aquel pobre pueblo, qué bonita la Fondation... si no hubiera una expo de BCN ahora mismo, igual me iba pallá...

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  6. Anónimo3:28 p. m.

    mgenial estampa!

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  7. Bonita, verdad? Ese Miró de los cuarenta y fu me entusiasma... Viste la gran retrospectiva que le hicieron en la Fundació hace unos años? Era de chillar de tan buena...

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  8. Que bonito cuadro
    y que fiesta mas
    snob!
    Miro es genial
    y las luces de
    el sur de france
    que comentas
    me han recordado
    al museo Matisse en ~Niza
    Ayer casi me dio un ataque
    de panico en oxford st!
    Y si
    me da pena
    que las ramblas sean ese rio
    lleno de carne zombie
    o sardinas viajeras
    no es su culpa
    zombies y sardinas
    pueden ser
    exquisitos
    pero en masa
    no somos
    soportables
    aunque quizas
    las aglomeraciones
    medievales eran mucho
    peor?
    pero a nadie le daban
    ataques de panico
    a nadie le parecian
    demasiado
    todos estaban encantados...
    todos pero....
    no
    seguro que la princesa del guisante
    era transportada por encima
    del lodo y las lechugas
    en una cajita con cortinas granas
    que filtraban el olor a orin
    y naranjas
    gargada a hombros de fuertes
    hombres taxi!!

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  9. Anónimo5:44 p. m.

    no ví esa retrospectiva que dices... debo ir al miró

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  10. Lost Child: yo habría sufrido mucho en la Edad Media, siempre pienso que me habría unido a una troupe de actores y trobadores, la única gente lbibre de la época, antes que dama en la torre o peor, campesina sometida al derecho de pernada... Me gustaban las copas, a fe mía, y las medias de Ivanhoe Roger Moore en b/n y aquella peli de Bresson y Robin Hood, pero vivir en aquello, nooo
    Ed: A mí me encantó ese baño de Miró, es difícil que se repita, obras que no se pueden ver nunca porque son de colecciones privadas, me eché en un sofá a mirar las nervaduras de las hojas de los árboles de la Masia u otros de esa época, me reí con la cabeza de pagès, asistí a esas fiestas dentro de los cuadros...

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